El Tango su Historia:Aeropuerto Traslados Ezeiza Newbery

El Tango su Historia

El Tango con origen Rioplatense. Prostíbulos y almacenes de mala muerte perdidos en las orillas de la ciudad fueron el primer escenario del Tango de esta música tramada con giros y melodías del candombe, la habanera antillana y una lengua que era, sobre todo, la credencial del hampa. En ese mundo hay que buscar también a los protagonistas de la escena arquetípica. parejas de hombre moviéndose morosamente bajo una luz mortecina y el resplandor ocasional de un cuchillo. En los oídos de las prostitutas que escuchaban las canciones iniciales, esa música permitía identificar la guitarra, la flauta y el violín. Una generación más tarde, cualquiera sabría ya, que en un Tango no podía faltar el sonido del bandoneón. Con la imprecisión que suelen tener estas genealogías, se dice que los primeros tangos sonaron en el sur de la ciudad hacia finales del siglo XIX.
Con los años, la música, o tal vez su mitología, empezó a seducir a los muchachos de las buenas familias obligándolos a mezclarse con la fuana del suburbio en escapadas iniciáticas. Para escándalo de la mejor sociedad porteña, el tango fue haciéndose un espacio social y finalmente económico, arrasando con el mercado del espectáculo. La incorporación del piano fue determinante para lograr su identidad definitiva. Los `40 fueron la década de oro del tango argentino, pero años anteriores ya habian consagrado al cantor Carlos Gardel como el mito popular por antonomasia. Junto al letrista Alfredo Le Pera, Gardel compuso buena parte de los tangos clásicos, triunfó en París -ritual imprescindible para cualquier mito local- y filmó películas en los Estados Unidos. Su muerte en un accidente aéreo el 24 de junio de 1935, en el cénit de su carrera, cerró el círculo de su condición semi sagrada. Nombres como Villoldo, Canaro, Fresedo, D´Arienzo, Troilo, Pugliese y Piazzola entre los músicos; Corsini, Lamarque, del Carril, Vargas, Sosa Y Goyeneche entre los cantantes; Manzi, Castillo, Flores, Cadícamo y Discépolo entre los poetas dan cuenta de una producción variada, profusa y de gran nivel.